FedericoSilva
Recibe medalla Bellas Artes 2016
«Mi trabajo no busca ser alabado por la crítica, dice el artista visual»
En la sala Manuel M. Ponce de Palacio de Bellas Artes se realizó la ceremonia de entrega de medalla para el escultor y pintor de 93 años que en sus inicios fue figurativo y trabajó la pintura de caballete. Autor de los libros La Escultura y Otros Menesteres, Viaje del Nahual de Tonacacíhuatl, y México por Tacuba. Fué ayudante del muralista David Alfaro Siqueiros. Hacía finales de los años 60´s incursiona en el arte Cinético, funda el estudio-laboratorio más importante en experimentación cinética de América Latina. A raíz de estos trabajos inicia su labor en el arte escultórico. Entre sus obras más importantes en México destacan Alux de la Muerte, en la Plaza de las Tres Culturas; Canto a un Dios Mineral, en el Palacio de Minería; el mural Principio, con una dimensión de más de seis mil metros cuadrados, sobre la superficie rocosa de la cueva de Huites, en Sinaloa. Destaca su participación en la UNAM con el primer mural abstracto, Espacio Matemático, que se encuentra en la facultad de Ingeniería y en el Espacio Escultórico considerado como un hito en la escultura contemporánea. Su obra monumental se muestra en varios países de Asia, Europa y América.
“Ha encarado todas las batallas con talento, valentía y, sobre todo, proveyéndonos de belleza a raudales. Silva es un convencido de renovar las tradiciones, de fundar continuidades críticas, nos tiene acostumbrados a su inteligencia. Por ello el distanciamiento con las formas del realismo”,
señaló el crítico de arte Luis Ignacio Sáinz, amigo de Federico Silva y quien estuvo acompañando al escultor en el presídium.Águeda Lozano, pintora y escultora y nueva Secretaria de Cultura de Chihuahua, también estuvo en el presídium y expuso: lo más grato para mí fue recibir la invitación del Museo Federico Silva a través de su director Enrique Villa para exponer en este esplendido espacio, en San Luis Potosí, yo siempre quise acercarme a los artistas abstractos y nadie me abría las puertas. Descubrí que hay que ser pacientes hasta atrapar lo bello. Cuando Federico hizo el libro Conversaciones con la obra de Águeda Lozano, y cuestionó ¿de qué está hecho el arte que perturba y enriquece? Descubrí que no existen palabras para describir lo más difícil que hay. Después de recibir el Premio Nacional de Ciencias y Artes, los Doctorados Honoris Causa por la Universidad Nacional Autónoma de México y la Universidad Autónoma de San Luis Potosí y ser nombrado Caballero Andante en la Mancha, España, entre muchas otras distinciones, Federico Silva recibe la Medalla Bellas Artes, de manos de Xavier Guzmán, subdirector de Patrimonio Artístico e Inmueble del Instituto Nacional de Bellas Artes.
“Hablaré sólo de lo cultural y no mencionaré la crisis. Existe una fractura entre el pueblo y los gobernantes que de tanto viajar al extranjero no entienden lo que pasa en México (…)”,
expuso Federico Silva al recibir el reconocimiento. Continuó “La fractura a la que me refiero no es un fenómeno local sino internacional. Existe en Norteamérica con la amenaza de victoria de (Donald) Trump con inimaginables consecuencias mundiales. La fractura está en el fenómeno creciente de los migrantes. La palabrería no logra borrar la memoria de un país que se mantiene por su historia. Mientras tanto el arte anda vagabundo, porque no encuentra las veredas, se pierde en la traición, la corrupción y la alabanza al poder. Los destructores de México perseveran en su esfuerzo tenaz con el aplauso de los compradores de afuera; el subsuelo ya no pertenece a México, está en rebaja. Pueden venir compradores de todo el mundo”. “No se hubieran atrevido a decir que la fuerza de México está en el Ejército y el Gobierno. No se hubieran atrevido a enviar a Oaxaca a las fuerzas militares y policiales para interrumpir las danzas de San Mateo del Mar en el Istmo de Tehuantepec, para combatir a los maestros y terminar con la última fuerza que perdura de la Revolución Mexicana. Arrebatan por la fuerza lo que pertenece a los maestros: dignidad, soberanía, sus derechos abriendo la educación al mercado”, acotó.
“El INBA debe retomar su prestigio de gran promotor. Los artistas aspiran a participar en el máximo foro, los jóvenes a escalar el difícil escaño del prestigio”,
finalizó Federico Silva. Al evento también asistieron un número considerable de escultores así como artistas de todas las disciplinas, la coordinadora Nacional de Artes Visuales del INBA, Magdalena Zavala Bonachea; el director del Instituto Tlaxcalteca de Cultura, Willebaldo Herrera Téllez; el secretario de Cultura de San Luis Potosí, Armando Herrera Silva y el director del Museo Federico Silva, Enrique Villa Ramírez. Además de amigos cercanos y público general, quienes abarrotaron la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.